Sociedad
El esplai La Grapadora tendrá que abandonar el local en septiembre
La entidad de ocio tiene hasta el 15 de septiembre para devolver las llaves
El 15 de septiembre. Esta es la fecha límite del esplai la Grapadora para devolver al Ajuntament las llaves del local municipal situado en los bajos de la avenida Andorra, 15. Así lo acordó la última Junta de Govern Local, que se celebró después de que el consistorio resolviera todas las alegaciones al concurso de entidades para ocupar el inmueble municipal.
«Cuando se publicaron las resoluciones, un martes, nos pedían salir del local el mismo sábado. Por logística nos era imposible. Por eso, se ha estipulado en septiembre», explica Max Fortuny, uno de los responsables del esplai. Los miembros de la entidad de ocio ya están vaciando el local.
«Desde el Ajuntament no nos han dicho nada más. Ahora, nos tendremos que buscar la vida. Costará mantener nuestra actividad», expresa Fortuny. Durante sus primeros nueve años de existencia, La Grapadora compartió el espacio con la Asociación de Vecinos Tarraco. Una vez se disolvió la entidad vecinal, el esplai mantuvo el local como su sede.
Sin embargo, su situación no fue regularizada nunca y el Ajuntament abrió un concurso público el año pasado. Hasta 23 entidades participaron y acabaron saliendo ganadoras cuatro entidades: la asociación Assexora'Tgn, el Casal Tarraconense, el colectivo de lesbianas, gais, bisexuales y trans del Camp de Tarragona H20 y la asociación Si Jo Puc, Tu També Epilep.
No saben cuándo entrarán
Fuentes de las entidades ganadoras explican que todavía no saben cuándo podrán acceder al local. «Vamos totalmente vendidos. Hemos enviado diferentes correos conjuntos en el Ajuntament y no nos contestan. Ni las llamadas», dicen.
El plazo máximo de duración de la cesión es de cuatro años, a contar desde la fecha del otorgamiento de la autorización. «Si tenemos local el próximo año, ya será mucho», añaden. Excepcionalmente, la duración podrá ampliarse mediante una prórroga, sin que la duración total pueda exceder a la del plazo inicial.
La demanda de locales de titularidad municipal es muy superior al número de equipamientos disponibles, de manera que, desde el Ajuntament se fomenta y prioriza el uso conjunto o compartido.
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