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El Ayuntamiento de Tarragona vuelve a licitar las obras para adecuar el edificio de la Torre Forta

Este espacio acogerá las oficinas del nuevo Servicio de Intervención Socioeducativa de Ponent

La Torre Forta es una fortificación de principios del siglo XX, declarada Bien Cultural de Interés Nacional.Cedida

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El Ayuntamiento de Tarragona ha sacado a licitación las obras de adecuación de la Torre Forta, un edificio municipal situado en el número 65 de la calle Francolí y que se encuentra en desuso desde el 2018. Este será el segundo intento del consistorio de adjudicar los trabajos de restauración.

El primero fue en marzo del 2023, pero el concurso acabó quedando desierto. Se presentó una empresa, pero no cumplía los requisitos exigidos. En aquella ocasión, el presupuesto era de 89.998,51 euros (IVA incluido). Esta vez, se ha incrementado hasta los 149.920,23 euros.

Tal como se explica en el proyecto presentado por el anterior gobierno, se quiere adecuar la masía para ubicar dependencias del Instituto Municipal de Servicio Sociales (IMSST). Concretamente, la Torre Forta acogerá las oficinas de atención al público del nuevo Servicio de Intervención (SIS) de la zona de Ponent.

Así, hay que habilitar el interior del edificio y el patio exterior para que puedan ser utilizados por el personal municipal y los usuarios. La masía se compone de planta baja, primera y segunda planta, y altillo; y cuenta con una superficie total de 759 metros cuadrados.

Se harán algunas actuaciones mínimas, durante unos tres meses, para poner a punto el inmueble. Dado que la edificación está catalogada como Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN), no se tocarán las fachadas. Una de las actuaciones más importantes será la construcción de un cierre interior de la escalera a fin de que quede protegida.

En el exterior, se derribará el muro perimetral del solar y se construirá uno nuevo, creando dos entradas, una para peatones y otra para vehículos. Sin embargo, se creará una rampa para cumplir con las condiciones de accesibilidad y se reacondicionará toda la finca.

Antigua sede del IMSST

La Torre Forta fecha del siglo XVII, durante el reinado de Felipe IV, que tenía la función de avisar a la población de los posibles ataques exteriores. Años más tarde, se convirtió en una masía y sirvió de refugio y escondite para varias familias durante la Guerra Civil.

Al principio del siglo XX, se empezó a edificar en los alrededores de la construcción militar, dando paso al barrio que en 1941 fue reconocido oficialmente como Torreforta en honor a la antigua fortificación. El edificio ya fue sede del IMSST entre 1993 y el 2015. Después, albergó el Patronato de Deportes hasta el 2018.

Ahora, acogerá el Servicio de Intervención Socioeducativa, que pretende reducir la situación de riesgo o vulnerabilidad y prevenir situaciones de desprotección entre los niños y adolescentes. También trabajará para fortalecer los vínculos emocionales entre niños y familiares, y la vinculación de estos con el territorio y servicios de la ciudad.

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