Diari Més

Sociedad

El Banco de Sangre de Tarragona necesita donaciones para recuperarse de la bajada estival

El organismo hace un llamamiento a los donantes para aumentar las reservas y hacer frente al crecimiento de demandas de septiembre

Tres personas donan sangre para el Banco de Sangre y Tejidos de Cataluña en el Hospital Joan XXIII de Tarragona.Gerard Marti Roig

Publicado por
Tarragona

Creado:

Actualizado:

Se aproxima septiembre y con él el fin del verano. La vuelta a la rutina que tantos temen es un momento esperanzador para el Banco de Sangre y Tejidos de Cataluña, que, como cada año, ha sufrido una bajada considerable en donaciones durante los meses estivales. «Hemos registrado un descenso del 30%, que es lo habitual. Los donantes están de vacaciones y se relajan, están por otras cosas, y entonces se olvidan de venir a donar sangre», explica Núria Vilanova, coordinadora del Banco de Sangre y Tejidos de Tarragona.

Además, añade, «muchos donantes viajan a países donde, una vez vuelven, no pueden donar sangre durante unos meses», como es el caso de Afganistán, Camerún, o Ecuador entre otros. Este hecho se debe a enfermedades como la malaria que se podría transmitir a través de transfusiones, convirtiendo la sangre donada en inutilizable.

«Es por eso que antes del verano hacemos un llamamiento a los donantes, les decimos ‘Descansa, disfruta, pero antes dona sangre’», explica Vilanova. A pesar del gran esfuerzo por conseguir este último empujón, la situación de escasez se repite cada año, dejando las reservas muy por debajo de lo que sería óptimo.

«Ahora mismo sólo tenemos 4 días de reserva, cuando para estar tranquilos nos gustaría tener entre 8 y 10 días. Esta falta de sangre nos hace sufrir, necesitamos más donaciones para poder garantizar el abastecimiento a todos los hospitales del territorio, especialmente teniendo en cuenta que en septiembre se reanudan muchas cirugías que quedan aplazadas durante la época estival», lamenta la coordinadora.

Una campaña festiva

«Los donantes tarraconenses son muy fieles, estamos muy agradecidos», expresa Vilanova. Este hecho, explica, se ve reflejado en actos como el maratón de Santa Tecla, que cada año cuenta con la colaboración de más de un millar de tarraconenses.

Este año el acontecimiento solidario celebra su 20.ª edición, que tendrá lugar el 14 de septiembre en el Teatro Tarragona, desde las 9 horas hasta las 21 horas. «Siempre es todo un éxito, la gente se implica muchísimo», asegura Vilanova. De hecho, afirma, «es uno de los maratones con mejores resultados de Cataluña, e incluso me atrevería a decir que de España». Su récord, explica, fueron 1.760 donantes en un día, pero espera que este año se pueda superar esta cifra.

«Siempre es una jornada muy especial. El ambiente es festivo y las personas tienen ganas de ayudar. Es un día de celebración y todos aquellos que colaboran se marchan cargados de alicientes y ‘detallitos’», apunta la coordinadora. «Campañas como esta nos van muy bien, porque nos ayudan a visibilizar esta necesidad y fidelizar nuevos donantes. A menudo muchas personas que nunca han donado sangre se animan a hacerlo por primera vez, y todo es una experiencia muy bonita», afirma.

Una sensación indescriptible

El miedo a las agujas es, sin duda, una de las barreras más comunes para muchos que consideran convertirse en donantes, y Vilanova es consciente de este hecho. «Es comprensible, a nadie le gusta recibir un pinchazo. Pero también creo que es importante tener en cuenta que estos diez, quince minutos de nuestras vidas pueden salvar tres», explica la coordinadora, que hace un llamamiento a empatizar con aquellas personas que necesitan donaciones. «Imagina los pinchazos que muchos han recibido y recibirán a lo largo de sus vidas», añade.

«Cuando esta sangre abandona el Banco para tratar a un paciente, los donantes reciben un SMS personalizado que les avisa y les informa sobre a qué hospital va dirigida. La satisfacción que se siente al recibir este mensaje es una sensación inexplicable. Creo que no existe un incentivo mayor que este sentimiento», concluye Vilanova.

tracking