Urbanismo
Territori prorroga las Normas de Planeamiento Urbanístico de Tarragona tres años más
La Generalitat considera «insuficiente» el plazo del Ayuntamiento de año y medio para aprobar definitivamente el POUM
La Comisión de Territori de la Generalitat ha prorrogado tres años las Normas de Planeamiento Urbanístico de Tarragona. El Ayuntamiento pidió en junio la ampliación de las normas subsidiarias en clave urbanística para un año y medio, mientras se tramita, se aprueba y entra en vigor el futuro POUM. Pero el plenario de la Comisión considera «insuficiente» el plazo propuesto por el consistorio y amplía la vigencia de la normativa tres años más.
«No lo recibimos de ninguna forma. Sabemos que un POUM es un tema complejo y entendemos que la Generalitat nos da confianza y nos permite agilidad, al no tener que estar prorrogando las normas si esto se alarga especialmente con alegaciones y recursos», explica Nacho García, consejero de Urbanismo del Ayuntamiento. Estas normativas rigen la ciudad en materia urbanística desde el año 2020, cuando una sentencia del Tribunal Supremo tumbó el POUM del año 2013.
Desde entonces, Tarragona trabaja para redactar, aprobar y aplicar un nuevo Plan de Ordenación Urbanística Municipal. El abril pasado, el gobierno municipal presentó un borrador de la nueva normativa. Esta prevé construir en una parte de la Horta Gran para unir el centro de la ciudad y los barrios de Ponent. Se prevé construir un nuevo barrio entre la N- 340 y la T-11, que se alargaría hasta Icomar. También, el ejecutivo apuesta porque la ciudad crezca por Llevant, concretamente por la Vall del Llorito y Mas d'en Sorder.
Reuniones paradas
De esta forma, el POUM con el que trabaja el gobierno está pensado para una Tarragona de 180.000 a 200.000 habitantes. La previsión del gobierno municipal es poder aprobar inicialmente la nueva normativa a principios del próximo año. El ejecutivo confía en conseguir el consenso de todos los grupos municipales. Sin embargo, fuentes municipales aseguran al Diari Més que desde abril no ha habido reuniones con los grupos de la oposición para tratar el POUM. La nueva ordenanza de terrazas y la aprobación de los presupuestos para el próximo año centran, de momento, las negociaciones entre los grupos municipales.
Se amplía la Brigada de Intervención
Del servicio se encargan Ematsa y Sorigué, que tienen contrato hasta marzo del 2026. «Necesitamos refuerzo, el trabajo no se acaba nunca. Estamos contentos con cómo funciona la aplicación Epp!, pero queremos trabajar lo más rápido posible», añade el consejero. La plantilla actual de la brigada es de 17 personas entre personal administrativo, técnicos, inspectores y oficiales y peones. «El mantenimiento es un trabajo poco vistoso, pero que se tiene que seguir haciendo», expresa García.