Seguridad
Un dron de la Urbana de Tarragona permite rescatar a una persona accidentada en el Bosc de la Marquesa
La Urbana amplía la unidad de drones con un aparato ligero, ágil y con megáfono
Durante la presentación del nuevo dron, desde la Guardia Urbana se explicó un caso de éxito reciente en el rescate de una persona accidentada en el Bosc de la Marquesa. «Durante un dispositivo, uno de los pilotos de dron observó cómo un hombre cerca de la cala Waikiki nos estaba haciendo señales desde las rocas, levantando los brazos. El dron se acercó y pudimos ver que la pareja del hombre se encontraba accidentada. Nos quedamos con las coordenadas, avisamos a los bomberos y al equipo sanitario y nos desplazamos con un coche patrulla. Gracias al dron pudimos rescatar a la mujer», detallaron Antoni Tost y Joan Domènech, jefe de la división de Servicios Centrales y sargento y subjefe de la división, respectivamente. El próximo año, los drones podrían colaborar en el rescate de personas en la costa.
Un dron capaz de volar 36 minutos de manera ininterrumpida, con una transmisión de imagen nítida, cámara térmica, megáfono, sirenas, paracaídas y de poco menos de un kilo de peso. Esta es la nueva adquisición de la Guardia Urbana de Tarragona, que ya cuenta con tres aparatos de dron. «Los delincuentes tienen que saber que Tarragona no es sitio para ellos. Los perseguiremos por el suelo, mar y aire», indicó el alcalde de la ciudad, Rubén Viñuales, durante la presentación del aparato.
En estos momentos, la Unidad de Drones de la Guardia Urbana cuenta con un cabo y tres agentes. El nuevo aparato es el tercero que se suma el cuerpo, pero el primero que se compró ha quedado obsoleto y ya no se utiliza. «La unidad de drones es imprescindible para mejorar la seguridad y la prevención y nos permite actuar en diferentes ámbitos. Es una herramienta moderna y eficaz que consideramos que es vital y que hay que impulsar», subrayó el alcalde.
El dron en Campclar y Orosi
Recientemente, los drones han servido para completar operativos en zonas como Campclar, la calle Orosi y la Part Baixa o las urbanizaciones de Llevant. Según se explicó desde la Guardia Urbana, las utilidades del dron son muy diversas: desde perseguir vehículos que se han saltado un control de seguridad hasta rescates y búsqueda de personas, vigilancia de zonas poco accesibles o de grandes concentraciones de personas. El pasado domingo, durante la llegada del presidente Salvador Illa, el dron sirvió para hacer una vigilancia del trayecto. La alta resolución de la cámara permitiría identificar agresores desde metros de distancia.
El nuevo aparato es el Dron DJI Mavic 3 Enterprise Thermal y tiene un coste de 7.029 euros (IVA incluido). Tiene un peso de 920 gramos y hasta 1050 gramos con accesorios, como altavoces y luces LED. Su autonomía de vuelo es de 38 minutos por batería y puede volar hasta 32 km en condiciones óptimas. Por otra parte, funciona a temperaturas entre -10 y 40 grados.
El dron cuenta con una cámara de gran angular de 48 megapíxeles con enfoque desde 1 metro y una telecámara de 12 megapíxeles con zoom digital 8x y enfoque desde 3 metros. El modelo Thermal incorpora también una cámara térmica-infrarroja, ideal para trabajar en condiciones de baja iluminación, localizar personas desaparecidas y detectar puntos de calor en situaciones como incendios o plantaciones ilegales.
Por otra parte, el rango de transmisión de vídeo es de 8 km sin obstáculos, pero se reduce a 1,5 km en entornos urbanos. El dron dispone de un altavoz externo que permite interactuar con los ciudadanos, un sistema de iluminación LED para operaciones en zonas de baja visibilidad y un paracaídas.