Judicial
Condenado en Tarragona a pagar 201.000 euros a Vodafone por una estafa telefónica
El resto de los seis acusados se encuentran en busca y captura
La Audiencia de Tarragona ha condenado a un hombre a pagar una multa de unos 1.743 euros y una indemnización de 201.950,12 euros por participar en una estafa telefónica, entre abril y en agosto de 2010. El condenado es uno de los siete acusados de un delito continuado de estafa y de otro de asociación ilícita. El resto de los investigados no se han presentado este lunes al juicio y se encuentran en situación de busca y captura.
Según el fiscal, el condenado aprovechó su situación de trabajador de un establecimiento en Tarragona por dar de alta varias líneas de teléfono falseando intencionadamente los datos personales de clientes reales, sin su consentimiento. Conjuntamente con los otros procesados defraudaron 201.950,12 euros en Vodafone S.A.U.
Según el ministerio público, una vez dados de alta los teléfonos, los números eran utilizados por los acusados, los cuales hacían llamadas masivas a teléfonos internacionales y de tarifación adicionales ubicados en España o en el extranjero a través de empresas que regentaban. Así, conseguían un «beneficio a costa del perjuicio» del operador Vodafone.
«Los números de tarifación adicional pertenecen a operadoras de telefonía, cuya gestión cedía a una segunda empresa, que a la vez, cedía la explotación final a una tercera, que presta el servicio de información de pago, conocido popularmente como 'servicio de voz'», recoge el escrito de acusación del fiscal.
De esta manera, según el ministerio público, quien presta el servicio recibe una retribución de la operadora por minuto facturado, mientras que la compañía telefónica a consecuencia de la activación «fraudulenta» de las líneas no las pudo facturar, ya que no existen los usuarios o no se habían hecho de forma válida los contratos.
Según el fiscal, cuatro compañías defraudaron a Vodafone S.A.U. la cantidad de 201.950,12 euros con la activación de las líneas falsas. Por eso, considera que los siete acusados son autores de un delito continuado de estafa y de otro de asociación ilícita y les pedía ocho años y tres meses de prisión para uno de ellos y seis años y tres meses de prisión para el resto.
Finalmente, este lunes, Fiscalia ha alcanzado un acuerdo con la defensa del hombre que se aprovechó de su situación de trabajador de un establecimiento, situado en la Rambla Nova de Tarragona, para sustituir las penas de prisión por multas. En el acuerdo, se ha tenido en cuenta el atenuante de dilaciones indebidas.
Así, se han sustituido las dos penas de prisión por dos penas de seis meses de multa con una cuota de tres euros, además, de dos multas más, de un mes y quince días por la misma cuantía. En total, se ha cifrado las sanciones en unos 1.743 euros. Aparte, se ha mantenido la petición de responsabilidad civil y el condenado tendrá que pagar una indemnización de 201.950,12 euros a Vodafone S.A.U.