Nuevo objetivo: tener presupuestos aprobados en Tarragona el 15 de noviembre

Después del pleno de este viernes, el gobierno municipal del Ayuntamiento de Tarragona cerrará la carpeta de las ordenanzas fiscales para centrar toda su atención y esfuerzos en las negociaciones para cerrar los presupuestos del 2025. Hace un mes, se hacía público que el ejecutivo socialista quería aprobar las cuentas este 18 de octubre.

Los grupos de la oposición veían «difícil» —algunos, incluso, «inviable»- llegar a esta fecha. El tiempo les ha acabado dando la razón. Ahora, según ha podido saber Diari Més, la voluntad del equipo de Rubén Viñuales es aprobar el presupuesto en el pleno ordinario de noviembre, que se celebrará, previsiblemente el día 15.

Durante las próximas cuatro semanas, el gobierno buscará los acuerdos necesarios para llegar a los 14 votos necesarios para llegar a la mayoría. De hecho, las conversaciones con los grupos de la oposición empezaron hace un mes. En estos primeros encuentros, Junts y ECP pidieron a los socialistas que dieran cumplimiento a los acuerdos alcanzados hace un año para la aprobación del presupuesto de este 2024. También lo hizo ERC.

Este año, sin embargo, los republicanos se han negado a negociar, alegando que «Viñuales ha dinamitado todos los puentes de confianza», por el incumplimiento de las inversiones pactadas y por el caso de espionaje a una técnica del Ayuntamiento. La portavoz de Esquerra, Maria Roig, reafirmó ayer su distanciamiento con el alcalde en una entrevista en Ràdio Ciutat de Tarragona.

El PP vuelve a estar fuera del tablero como pasó el año pasado, mientras que los consejeros no adscritos, Javier Gómez y Jaime Duque, apuntaban a ser posibles comodines para los socialistas para conseguir la aprobación de las cuentas. A pesar de la buena predisposición de los ex de Vox a llegar a un acuerdo, el gobierno ha descartado seguir conversando con ellos por el presupuesto.

Viñuales quiere responder así a una de las exigencias compartidas de Junts y los comunes, con quienes el ejecutivo está priorizando las negociaciones. El portavoz de ECP, Jordi Collado, celebra este «cambio de actitud con respecto a los dos tránsfugas» y vuelve a insistir en que no aceptarán estar en ninguna fórmula en la que participen ellos.

En las últimas semanas, ha mantenido reuniones con la comisión negociadora del gobierno —formada por la consejera de Hacienda, Isabel Mascaró, y el asesor especial de Alcaldia, Pau Pérez- para revisar los acuerdos del año pasado. El nivel de cumplimiento era muy bajo hace unas semanas, pero, ahora, está «muy bien». «Se han empezado a mover partidas que no se habían tocado, como los 500.000 euros destinados a la eliminación de barreras arquitectónicas», afirma Viñuales, quien detalla que «ya se han hecho reservas de crédito».

El voto final, en asamblea

Comuns celebrará hoy una asamblea para exponer los acuerdos que han alcanzado por las ordenanzas fiscales y también para recoger propuestas para los presupuestos del próximo año, mientras que Podem lo hará mañana. A partir de la semana que viene, ECP empezará los encuentros con el gobierno para cerrar un posible acuerdo. El sentido del voto, sin embargo, se acabará decidiendo, de nuevo, en asamblea.

Por su parte, Junts está elaborando una lista de propuestas mientras espera a la próxima reunión con el ejecutivo socialista. Después de que Viñuales cumpliera «un 85%» de los pactos cerrados el año pasado, los soberanistas están abiertos a volver a llegar a un acuerdo para la aprobación de las cuentas.