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El incremento a la tarifa del alcantarillado de Tarragona se mantendrá al menos los próximos ocho años
Les obras de Ematsa se alargarán hasta el 2033 y se «peatonizarán» las calles donde se tenga que abrir zanja
Los responsables del Plan de mejora del alcantarillado en Tarragona presentaron el proyecto ayer en la sede de Ematsa.
El incremento a la tarifa del alcantarillado de Tarragona se mantendrá, mínimo, durante los próximos ocho años. Les obras de Ematsa en el subsuelo se alargarán hasta el 2033, hecho que provocará esta continuidad. Así lo confirmó ayer el consejero de Dominio Público, Nacho García. Los responsables del proyecto presentaron a los medios el Plan de mejora del alcantarillado, de igual forma que se ha hecho con las diferentes federaciones vecinales en las últimas semanas. «La confección del plan ha sido una tarea ardua de análisis del alcantarillado, que se ha llevado a cabo desde el 2013 en el 2022», indicó Daniel Milan, gerente de Ematsa. Durante este periodo, se fue introduciendo un robot en cámara que analizaba el estado de los tubos en los 300 kilómetros de la red.
En total, se actuará en 30 km de alcantarillado. El 75% de las actuaciones se harán con un sistema de manguera, hecha de fibra de cristal, polipropileno y resina, que permite no tener que abrir zanja en las calles. «Se rebaja un 50% los costes económicos y en 48 horas se pueden terminar las actuaciones», expuso Milan. De hecho, en varias calles de la Parte Alta y de Ponent ya se ha actuado. «Además, el nuevo sistema mejorará la capacidad hidráulica de las cañerías, dando más velocidad al curso del agua.
Y también permitirá luchar contra las plagas de cucarachas, ya que dificultará sus movimientos y, al eliminar las juntas, entorpecerá la posta de huevos.
Por otra parte, el gobierno municipal mantiene la voluntad de «peatonalizar» aquellas calles donde se tenga que abrir zanja por el mal estado del alcantarillado.
Calendario a finales de año
«Es un compromiso adquirido con En Comú Podem. Intentaremos que las obras del Ayuntamiento y las de Ematsa puedan estar al mismo tiempo en aquellas zonas», apuntó García. Todavía no se han determinado qué calles serán, aunque a finales de año el consistorio ya conocerá qué zonas formarán parte del plan, así como el calendario de las intervenciones. «Quizás no todas las calles se pueden habilitar por los peatones, por el tráfico que pueda haber u otras casuísticas. Si eso es así, se negociará con ECP qué hacer en cada caso», sentenció el consejero. Este tipo de intervención sólo representará el 25% del conjunto.
Con todo, el grueso de los trabajos arrancarán en tres meses. «Casi cada semana se abrirán calles y empezaremos por los más urgentes. Un plan de estas características se ha hecho en pocas ciudades. Correr, en estos casos, se poder hacerlo todo en ocho años,» comentó Milan. La inversión total de Ematsa en estos años será de 16 millones de euros.