Empiezan las obras del futuro Parque del Port, que se alargarán 12 meses

Las obras para la construcción del nuevo Parque del Port han empezado este días con trabajos de de pavimentació y redirección del tránsito rodado. El futuro Parco del Port transformará el entorno de las sedes de la Autoridad Portuaria de Tarragona (APT) en un gran espacio verde, accesible y sostenible. Con un presupuesto total de 3,25 millones de euros (IVA incluido), el proyecto tiene una duración prevista de doce meses y está dividido en tres fases constructivas.

La Autoridad Portuaria de Tarragona ha iniciado este mes de noviembre las obras del nuevo Parque del Port, una actuación para la reordenación urbanística del entorno de las sedes administrativa e institucional con el objetivo de crear un nuevo gran parque verde que favorezca una movilidad más sostenible en este lugar de la ciudad. Los primeros trabajos han consistido la retirada de cemento y asfalto en la zona próxima a las vías del tren y en la reordenación del tráfico de vehículos para poder coger la primera de las tres fases de construcción.

El nuevo Parque del Port nace con el objetivo de abrir el puerto a la ciudad, creando una conexión directa entre Tarragona y el mar. Con una superficie de 30.000 m2, el parque transformará los alrededores de los edificios de la Autoridad Portuaria de Tarragona (APT), creando la nueva Plaza de la APT, transformando el paseo del Reloj del Port y el Km 0 cerca del mar. El proyecto también prevé la construcción de una gran escalinata en el muro del dique de Llevant para conectar el muelle de Costa con la futura plaza de la APT.

Proyecto por fases

El proyecto se llevará a cabo en tres fases diferentes con el fin de interferir el mínimo posible en el día a día de los trabajadores de la APT y de las empresas, establecimientos y entidades de los alrededores. Esta planificación de las tres fases asegura siempre el paso de personas por el paseo de la escullera o km0, el paso de vehículos por la circunvalación de la costa y acceso al aparcamiento de los toldos y al vial del paseo del rompeolas o Km0, y el normal desarrollo de los autobuses de la EMT. Además, se ha procurado que la reducción de las plazas de estacionamiento no regulado sea gradual, hasta su completa desaparición en junio de 2025.

Desde este mes de noviembre hasta marzo de 2025, la primera fases contará con actuaciones que no comportarán una alteración a la circulación ni en el uso de las plazas de estacionamiento actuales. Las actuaciones se centrarán en la modificación del vial de vehículos actual que circunvala la costa.

La fase 2, que va de marzo del próximo año hasta junio, afectará en el vial del reloj y el vial de mar. Las obras actuarán directamente sobre el vial de mar, adecuándolo a la funcionalidad futura de doble sentido de circulación. Eso comportará el corte de circulación por este vial y la eliminación permanente de las plazas de aparcamiento. El desvío provisional de circulación de vehículos se hará por el vial del reloj, que pasará a doble sentido eliminando el aparcamiento en línea, pero conservante el aparcamiento en batería. La eliminación de estas de estacionamiento no regulado será permanente.

Finalmente, la fase 3 se desarrollará de junio a noviembre de 2025 aproximadamente. En esta se transformará todo los alrededores de las oficinas de la APT en un gran parque para el paso y disfrute de las personas, eliminando la circulación de vehículos del vial del reloj así como de delante de la sede de la APT y la rotonda del reloj de sol. El paso de vehículos quedará limitado a los dos viales construidos en las fases 1 y 2 que interconectan en forma de «T». En esta fase también se abrirá una gran escalinata que permitirá conectar la Escalera Reial con el Parque del Port. En esta fase se eliminarán las plazas de aparcamiento no reguladas restantes en el vial del reloj y las plazas reservadas a visitas y de aparcamiento de motos de delante de las oficinas de la APT. El reloj de sol será reubicado en la plaza delante del Tinglado 1 en el Moll de Costa.

Un refugio climático

El Parque del Port se convertirá en un auténtico refugio climático en la ciudad. La plantación de especies autóctonas resistentes al clima y la creación de sistemas de drenaje sostenible para gestionar el agua de lluvia ayudarán a mitigar los efectos del cambio climático. La reforma de este espacio aumentará las zonas verdes en un 64%, pasando de los 7.000 m2 actuales a los 11.500 m2 una vez finalizadas las obras. Esta transformación permitirá fomentar la biodiversidad urbana y crear un paisaje más verde y agradable para la ciudadanía.

El Parque del Port será un espacio para las personas, donde se podrán realizar actividades culturales, lúdicas y deportivas. El proyecto quiere contribuir a mejorar el bienestar y la salud de la ciudadanía, ofreciendo un espacio verde y saludable donde disfrutar del tiempo libre.

El parque será un espacio pensado para peatones y bicicletas, con una reducción significativa del tránsito rodado. Para conseguirlo, se simplificará la estructura del sistema viario actual, pacificando los viales y dando prioridad a los peatones y ciclistas.

La reorganización de los aparcamientos es otro aspecto clave del proyecto. Se reducirán en un número considerable de plazas de aparcamiento para vehículos privados. Esta medida busca desincentivar el uso del vehículo privado y favorecer el uso de medios de transporte más sostenibles.