La Part Alta, en pie de guerra contra las nuevas zonas de aparcamiento

Un grupo de vecinos de la Part Alta ha puesto en marcha una recogida de firmas en contra del cambio en la política de aparcamiento del barrio. Además, afirman estar preparando una protesta en forma de marcha lenta de vehículos para evitar el acceso a la Part Alta en momentos de gran afluencia de personas no residentes en caso de que sus peticiones no sean escuchadas.

Concretamente, los residentes denuncian el repintado de las zonas verdes a azules, un hecho que, afirman, les deja sin suficientes plazas para aparcar, «expulsándolos del barrio». De esta manera, los vecinos reclaman recuperar la política anterior, que les permitía aparcar de forma gratuita en el sector de Llevant y en todo el Eixample Nort. Con la nueva división, en cambio, los habitantes pierden las zonas ubicadas en la Vía Augusta y alrededores, Ciutat Jardí, Camp de Mart y Músics.

Los vecinos ya manifestaron su desacuerdo con este cambio el miércoles pasado, cuando se reunieron con la concejala del barrio, Sandra Ramos, la cual se comprometió a valorar una reconsideración del nuevo mapa, creado para adaptarse a la Zona de Bajas Emisiones. Además, durante el último pleno municipal, celebrado el pasado jueves, ERC presentó una moción donde pedían regular el aparcamiento Torroja con zona naranja y una rebaja para los vecinos. La moción fue desestimada, pero durante aquel mismo pleno, la consejera de Movilidad, Sonia Orts, anunció que los vecinos de la Part Alta podrán aparcar en 157 plazas adicionales a las que actualmente les corresponden por zona.

La medida, en cambio, no satisfizo a los residentes, ya que la consideran insuficiente. «No tenemos nada en contra de la ZBE, es simplemente una cuestión de lógica. Queremos poder aparcar en las zonas de siempre, no tiene ningún tipo de sentido que un vecino de la Part Alta tenga que hacerlo en la Imperial», lanza Enric Benaiges, propietario de la librería La Quimera y uno de los vecinos afectados. «El barrio está muy crispado. Entre la suciedad, el ruido, el exceso de pisos turísticos... Eso ya ha sido la gota que ha hecho colmar el vaso, pero estamos abiertos al diálogo. Lo que queremos es negociar con el Ayuntamiento, que entienda la realidad de la Part Alta», asegura.

Es por este motivo que el grupo de residentes ha decidido movilizarse. De momento, afirma Benaiges, superan las 100 firmas recogidas. El documento se entregará al Ayuntamiento este viernes. Hasta entonces se puede firmar en La Quimera, en Calçats Ollé, en el Forn de pa Peñarrubia, en la Carnicería Maria José o en la Bodega Gerard.

Una nueva plataforma

La plataforma impulsora está formada por unas 50 personas y recibe el nombre provisional de Ara Part Alta. Aunque actualmente funciona de forma independiente, su intención, explica Benaiges, es que más adelante pase a formar parte de la Asociación de Vecinos de la Part Alta. «Estamos trabajando para que las dos entidades se fusionen. Creemos que una renovación podría ser muy beneficiosa para el barrio», apunta.