Efeméride
Se cumple medio siglo de la incorporación de las mujeres a la Guardia Urbana de Tarragona
El primer servicio donde participaron fue en la cabalgata de Reyes de 1975
La incorporación de las mujeres a la Guardia Urbana de Tarragona cumple 50 años. El 27 de diciembre de 1974, el plenario del Ayuntamiento aprobó el expediente que dio origen a la «sección femenina de la policía municipal», un hecho que daba luz verde a la entrada de las mujeres en el cuerpo. La primera acción donde participaron las policías fue en la cabalgata de Reyes de 1975.
Tarragona fue una de las capitales pioneras en la incorporación de las mujeres en su policía municipal. Según documentos de la época, en un escrito dirigido a Alcaldía, el jefe de la Guardia Urbana Francesc Garcia Barberà, afirmó que Tarragona fue la primera ciudad en el Estado que se planteó la posibilidad de incorporar mujeres en la plantilla. Ahora bien, esta iniciativa se vio paralizada por falta de legalidad, pero unos años más tarde se reactivó.
En total fueron 8 mujeres las que superaron el proceso selectivo, las cuales fueron contratadas con la misma remuneración que los hombres. Algunos de los requisitos para poder acceder al cuerpo policial en aquella época eran tener entre 18 a 35 años, una altura mínima de 1,6 m, ser solteras o viudas y superar las pruebas que fijaba el Reglamento.
«Los inicios fueron duros»
Maria Teresa Roca Navarro trabajaba en una fábrica textil cuando decidió hacer las oposiciones para entrar a formar parte del cuerpo. Tenía 20 años cuando se incorporó y trabajó 42, hasta que se jubiló. Recuerda que «los inicios fueron duros, pero la cosa fue cambiando con el tiempo. Al principio los compañeros no aceptaban que estuviéramos en el cuerpo, no fue fácil».
Roca explica que «para ser mujer me pusieron en un cruce durante muchos años gestionando el tráfico durante 8 horas cada día hasta que no hubo semáforos. Tanto si hacía frío como si llovía tenías que estar allí, no podías abandonar el sitio».
Sobre la vestimenta, apunta que las mujeres «llevábamos minifalda, botas y una chaqueta delgadita. Recuerdo que el día de la cabalgata de Reyes de 1975, cuando salimos el primer día, nos quedamos heladas. Aquello no era un uniforme para estar en la calle en pleno invierno, pero es lo que había en aquel momento». Haciendo una comparación entre el pasado y el presente, celebra que se haya avanzado en términos de igualdad.