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Las zonas más caras y más baratas de la ciudad de Tarragona para comprar un piso

Aunque Tarragona no es una de las ciudades más caras de España, las diferencias entre barrios son notables

La capital tarragonina és un dels 140 municipis tensionats de Catalunya.

Imagen de unos pisos en Tarragona.Gerard Martí

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El mercado inmobiliario en Tarragona refleja una realidad compleja que se vive en muchas ciudades españolas, donde el precio de la vivienda continúa incrementándose, poniendo a muchas personas en una situación difícil para acceder a la propiedad. A pesar de la dificultad para comprar, Tarragona sigue siendo un lugar atractivo por su proximidad a Barcelona, su historia y su calidad de vida.

Según el informe de Evolución del precio de la vivienda en venta en España elaborado por el portal inmobiliario Idealista, el precio medio del metro cuadrado en Tarragona registrado en diciembre de 2024 es de 2.036 euros, lo que demuestra un incremento en comparación con meses anteriores. Por ejemplo, en enero de 2024, el precio medio del metro cuadrado en la ciudad se situaba en los 1.864 euros/m2.

Además, es interesante observar que, aunque Tarragona no es una de las ciudades más caras de España, las diferencias entre barrios son bastante notables. Si bien el barrio más rico es el dels Músics, con una renta media por hogar de 72.465 euros, según el INE, las urbanizaciones de Llevant, Eixample y Nou Eixample Nord son las zonas en las que el precio del metro cuadrado es más elevado. En ellas, la media se sitúa en 2.295 euros/m2, 2.198 euros/m2 y 2.169 euros/m2, respectivamente.

Por otro lado, las zonas más baratas de la ciudad de Tarragona para comprar un piso se encuentran en el barrio de Sant Pere i Sant Pau, con un precio del metro cuadrado de 1.745 euros/m2, Barris Marítims (1.903 euros/m2) y Nou Eixample Sud (1.988 euros/m2). Las dos zonas que no se encontrarían entre las más baratas, pero tampoco entre las más caras son la Part Alta (2.058 euros/m2) y La Móra (2.163 euros/m2).

Así pues, aunque Tarragona puede ser una ciudad relativamente asequible comparada con otras grandes urbes españolas, la creciente inflación de los precios inmobiliarios la convierte en un reto para quienes desean adquirir una vivienda. Por ello, el alquiler sigue siendo una opción muy frecuente para muchas familias y jóvenes, quienes no pueden hacer frente a las altas entradas necesarias para solicitar una hipoteca.

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